Me temo que el porvenir para Andalucía nunca llegará. Esa membrana temblorosa y maloliente, que emergía de vez en cuando a la superficie, será perpetua. Andalucía seguirá siendo la tierra de María Santísima y los ERE de los socialistas. Sangre, sudor y lágrimas. Los andaluces harían bien resignándose con la casta política que les ha tocado en suerte. De momento, Podemos y Ciudadanos no han llevado nada al Parlamento y han actuado como convidados del festín de Susana Díaz. Se han comportado como súbditos. Son los nuevos esclavos del régimen socialista, IU ya lo era.
El proceso de constitución de la Mesa del Parlamento refleja muy bien esa
temblorosa membrana.
El régimen
funciona.
AGAPITO MAESTRE
20/04/2015
QUIZÁ EL presente político de
Andalucía sea una ficción, una
temblorosa membrana, entre el pasado, que se resiste a pasar, y un futuro
incierto y azaroso que no quiere llegar... Me temo que el porvenir para Andalucía nunca llegará.
Esa membrana temblorosa y maloliente, que emergía de
vez en cuando a la superficie, será perpetua. Andalucía seguirá siendo la tierra de
María Santísima y los ERE de los socialistas. Sangre, sudor y lágrimas. Los andaluces harían bien resignándose con la casta política
que les ha tocado en suerte. De momento, Podemos y Ciudadanos no han llevado nada al
Parlamento y han actuado como convidados del festín de Susana Díaz. Se han
comportado como súbditos. Son los nuevos
esclavos del régimen socialista, IU ya lo era.
El proceso de constitución de la
Mesa del Parlamento refleja muy bien esa temblorosa membrana. El pasado cutre, ramplón y populachero del
partido dominante en Andalucía lo personificaba quien actuaba como presidente, por su provecta edad, de una Mesa que dirigía el
proceso de constitución del Parlamento. ¿Quién es ese hombre? Uno de tantos funcionarios del
socialismo negro que vive de lo que mata: Andalucía. Ni su nombre merece la pena escribirse. Es uno más de los que han arruinado eso que hace al hombre
auténticamente humano: la política. Actuó asaltando el sentido común y robándole a los
electores su representación en ese órgano del Parlamento. Quien esperase otra actitud de esta gente, no sabe nada de
la perversa condición humana.
El PSOE-A ha actuado,
como lo ha venido haciendo en los últimos 33 años en ese parlamento, maltratando la ley, con broncas permanentes y chanchullos
contra Andalucía. El PSOE ha seguido actuando
como si tuviera mayoría absoluta. Nada de eso es extraño. Lo peor es que
el PSOE-A ha domesticado a
los andaluces para que vivan alterados permanentemente en sus instituciones.
El personal ya parece acostumbrado a vivir en el barro político y la abyección
democrática. Lo sucedido el jueves pasado nos dice que
todo sigue igual, después de las elecciones. Y, seguramente, irá a peor.
Las condiciones de vida
política en Andalucía son insoportables. ¿Cómo
reacciona la ciudadanía ante ellas? Algunos se
rebelan, otros se tornan apáticos y el grupo más numeroso se engañan a sí
mismo. Los rebeldes son suicidas políticos. Los apáticos viven aceptando lo externo y diciendo lo contrario de lo
que piensan. Y los que viven engañándose
permanentemente, la mayoría de los votantes de
Podemos y C's, dirán que estas dos nuevas formaciones no pudieron hacer otra
cosa que abstenerse en la disputa entre PP y PSOE para constituir la Mesa. Falso. Podían haber
hecho muchísimas acciones, salvo lo que hicieron, a saber, comportarse como cobardes,
imitando al PP. Sí, señores del PP, ustedes se comportaron, como
llevan comportándose 33 años con el PSOE, tragando con todo. De las mil cosas que podía haber hecho, hay una obvia:
«marcharse del Parlamento»... Es tan patético el comportamiento del PP como las
declaraciones del vicepresidente tercero de la Mesa del Parlamento de
Andalucía, el señor de Podemos, cuando se queja de modo cínico: «Falta un pacto
de legislatura de los cinco grupos». ¡Terrible majadería!
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