IMPRESIÓN
Hoy tomarán posesión los nuevos consejeros del Gobierno
de la Junta de Andalucía, seis del PP y cinco de Cs. El Ejecutivo de coalición
encargado de traducir a políticas concretas el cambio se presenta bajo la doble
bandera de la eficiencia política y la lucha contra el paro. De momento
reduce el número de consejerías y anuncia
la auditoría que debe sacar a la luz el verdadero tamaño de la administración
paralela, un tupido entramado de entes, fundaciones, cargos a dedo y empresas
públicas. Junto con la auditoría, en la
primera reunión del Consejo de Gobierno se aprobará el inicio de los trámites
para bonificar al 99% el impuesto de Sucesiones y Donaciones. Que esta reunión
vaya a celebrarse en Antequera, sede de la firma de la autonomía andaluza,
expresa una clara reivindicación de la España autonómica.
El presidente Juan Manuel Moreno y el vicepresidente Juan
Marín han confeccionado un gabinete que apuesta por perfiles técnicos con
experiencia gestora y solventes currículos. Solo Javier Imbroda, en Educación y
Deporte, ofrece un perfil mediático. Elías Bendodo, presidente de la Diputación
de Málaga, será consejero de Presidencia y hombre fuerte de Moreno, mientras
Economía estará en manos de un independiente de prestigio como Rogelio Velasco.
Una consejería de Familias garantizará la consideración a la pluralidad de la
sociedad andaluza. Se comprende
el interés de Rivera por escenificar el peso de su partido, que se estrena en
tareas de gestión, pero importa recordar que aquí ya no hay dos facciones sino
un solo Gobierno. La
tarea es ímproba y el bien común ha de ser la única brújula de este Ejecutivo
bicolor.
- El consejero de Presidencia, Administraciones Públicas e Interior, Elías Bendodo: "Somos un único gobierno, un único equipo"
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