HUELVA
- Un juez de Huelva investiga si dos ediles se descolgaron de una moción de censura a cambio de un puesto de trabajo para la esposa de uno de ellos
- Un juez de Huelva investiga si dos ediles se descolgaron de una moción de censura a cambio de un puesto de trabajo para la esposa de uno de ellos
Otra grabación de sonido en poder de EL
MUNDO, que ya está investigando un juzgado, confirma el presunto
soborno que se fraguó en el municipio onubense de Aljaraque -el pueblo
«perdido» al que se refirió Podemos- a cambio de que dos concejales de Sí se Puede se descolgaran de una
moción de censura que habían pactado con el Partido
Popular para derribar a la alcaldesa
socialista.
El Juzgado de Instrucción 5 de Huelva está investigando si, tal y como ha
denunciado un vecino de este municipio, que habría presenciado estas
negociaciones porque era colaborador de Sí se Puede, el PSOE habría
ofrecido, a través de un intermediario de CCOO, un puesto
de trabajo en una empresa pública a la esposa del concejal de Sí se
Puede, Francisco Martín, a cambio de que se retirase la moción de censura.
Al otro edil de esta formación
involucrado, Pedro Escalante, se le daría una concejalía en el Ayuntamiento de Aljaraque sin remuneración, pero con asignación económica por asistir a las juntas de
gobierno locales. En total, unos 800 euros al mes, según las fuentes consultadas
por este diario. Ambas promesas ya se han cumplido. La mujer del edil trabaja
en Aguas de Huelva desde principios de febrero y Escalante es ya concejal de
Desarrollo Local, Consumo y Turismo, sin remuneración pero con derecho a cobrar
200 euros de cada junta de gobierno. Al mes se celebran cuatro.
El nuevo
audio recoge una conversación entre el vecino que ha denunciado el caso ante el
juez, M.A.A., y el concejal Pedro Escalante, que también pertenece a CCOO. En
ella, el edil afirma que Ignacio Caraballo, presidente de la Diputación de Huelva y secretario provincial del PSOE
onubense, «ha dado el visto bueno» y ha dicho que «para
adelante» a la contratación de la mujer del otro concejal de Sí se Puede, Francisco
Martín, en la empresa pública
Aguas de Huelva.
«Eso no debe saberlo nadie. Es una cosa
nuestra que no debe salir de los que estábamos allí en la mesa con Caraballo»,
en referencia al presidente de la Diputación de Huelva, afirma el concejal
Escalante, quien añade que, de esta forma, «protegen» a Francisco Martín, al
que llaman «Francis». «Es que le van a seguir diciendo que es un
pesetero», responde su
interlocutor, ante los rumores que había en el pueblo, después de que retirasen
la moción de censura contra el PSOE.
«Cerramos bien para que
nosotros, por asistencia a las comisiones de gobierno, yo cobrara porque era lo único que iba a cobrar», afirma en otro momento de la
conversación, corroborando así la otra promesa que les habrían hecho los
socialistas por retirar la moción.
El presidente de la Diputación
de Huelva jugó un papel clave. A mediados del pasado enero, cuando la moción de censura fue desactivada,
Caraballo reconoció públicamente la labor del concejal Pedro Escalante. «La buena relación entre nosotros y
CCOO nos ha servido para poder limar todas las asperezas que había entre los
distintos grupos», subrayó Caraballo el pasado 12 de enero.
El secretario provincial del
PSOE de Huelva también agradeció su trabajo a José Luis Rodríguez, dirigente de
CCOO_en Huelva, que figura en la denuncia como el supuesto «enviado
político» de los socialistas para negociar el intercambio de favores.
Este sindicalista aparece en la primera
grabación de sonido, publicada por este diario el
pasado 19 de febrero. En ella, promete a su interlocutor que «metería» a la mujer del
concejal Francisco Martín en la empresa Aguas de Huelva.
Tanto CCOO como el PSOE niegan
el supuesto soborno de Aljaraque. «El trabajo del PSOE ha sido
impecable y dentro de la más absoluta legalidad», afirmó Caraballo el pasado viernes.
Carteles del “enchufe”
Unos vecinos mostraron en el último
pleno del Ayuntamiento de Aljaraque carteles con el mensaje: «Yo
también quiero un trabajo en Aguas de
Huelva», lo que evidencia el malestar que hay en el municipio con el presunto
soborno que frustró la moción de censura. Por su parte, la alcaldesa socialista,
Yolanda Rubio, alega que no prometió a nadie un empleo a cambio de la retirada
de la moción de censura. Mientras, Francisco Martín dice que su mujer «lleva en
Aguas de Huelva haciendo contratos de sustitución al
menos dos años».
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