TRIBUNALES. Afirma que la entidad no tiene carácter estatal.
- La Fiscalía archiva el caso de los enchufes en la Fundación de la UMA
SOPLA TERRAL.
La ansiedad de lo normal, por Berta Gónzalez de Vega.
"Los imprescindibles"; tienen que estar....
AL EX CONSEJERO de Empleo,
Antonio Fernández, le debemos una descripción precisa de lo ocurrido en los
últimos años: se ha generado «una crisis de ansiedad y todo lo que
había sido normal deja de ser normal». La casualidad ha hecho que su explicación coincida con el archivo de
Fiscalía sobre los enchufes de los yernos de la entonces rectora, Adelaida de la Calle y del ex gerente de
la Universidad de Málaga, José Molina. Concluye la Fiscalía
que, al ser una fundación privada -que presidía ella, que se nutría de fondos de la UMA, y que
ocupa edificios de la universidad- allí se puede contratar a quién se estime conveniente. Los yernos
son estupendos de personal de confianza. Quién se va a quejar luego de suegros.
Me enteré de esas contrataciones
en una merienda infantil, sándwiches de nocilla y globos. Hablábamos
los que
querríamos que nuestros hijos estudiaran fuera. De la
endogamia de la universidad. Entonces, un padre asintió: «No se cortan. En la
fundación están los yernos de la rectora y del gerente». Algunos nos quedamos estupefactos y él
sonrió: «Si
lo sabe todo el mundo». Lo «normal» del ex consejero Fernández.
El periodismo suele tener como objeto el narrar lo
extraordinario. Pero, en Andalucía, en este periódico, demasiadas veces
nos hemos tenido que mojar con lo que cientos, miles, veían normal. Todo es tan normal que el campeón
del periodismo de denuncia, Jordi Évole, nunca ha bajado de Despeñaperros, porque aquí muchas
corruptelas gozan del beneplácito social. ¿Que se enchufa a familiares? ¿Y? ¿Que se da una subvención a la
empresa de minas donde trabaja tu hija? ¿Y?
Pasa que los indignados con la
corrupción política callan con la universidad si les toca cerca. Pero
algunos nos empeñaremos en seguir contando lo que miles ven normal porque lo
hace «todo el mundo». Todo, no. Nuestros lectores, por
ejemplo. Andaluces que no se sienten parte de «mi heente» peronista de la
presidenta andaluza que encandila a periodistas de Madrid, obnubilados por la retórica de una
aprendiz de Felipe González frente al espejo. Ella seguro que vio
normal que su marido fuera multitarea en un curso de formación de la Fundación
de la UGT. Que le
den un cargo ya. Como al yerno de la rectora, a la que luego
hicieron consejera de Educación. A lo mejor hasta habla de ética a los niños, en sus
visitas a colegios. De lo normal o de lo que está bien.
Esta normalidad no estuvo en el discurso de Susana
Díaz en el Ritz, ceñida a la abstracción chamánica de la dignidad de un pueblo.
El economista José Carlos Díez, al más puro estilo Magdalena Álvarez old times,
alabó el papel de la locomotora de la economía andaluza. En breve, Start Up Andalucía, ya verán. Citaba Gabriela
Bustelo en un artículo a Orwell: «Cuando el engaño es masivo, decir la
verdad es un acto revolucionario». Lo intentaremos
mientras podamos. Combatiremos esa normalidad de Antonio Fernández,
un fraude masivo con un testigo protegido que se
atrevió a señalar al rey desnudo, o sea, a los cursos de formación. Y
nada será ilegal. Como los enchufes en la fundación de la UMA
TRIBUNALES. Afirma
que la entidad no tiene carácter estatal
La Fiscalía archiva el caso de los
enchufes en la Fundación de la UMA
La Fiscalía Superior de Andalucía ha dictado un
decreto de archivo de las diligencias de investigación llevadas a cabo sobre la
Fundación General de la Universidad de Málaga (Fguma), en concreto sobre las
contrataciones.
Así lo han asegurado a Europa Press fuentes
judiciales, quienes han señalado que la Fiscalía Superior considera que las
diligencias no tienen significación penal por estimar que la Fguma
no tiene carácter estatal, aunque entiende que el procedimiento empleado para las
contrataciones no es correcto.
Al no tener carácter estatal, según han precisado
las mismas fuentes, se considera que puede contratar con arreglo al Estatuto de los
Trabajadores en virtud de convenios y puede no someterse a la ley de contratos
del sector público, que obligaría respetar principios como igualdad, mérito y
capacidad.
Esta causa se iniciaron en la Fiscalía malagueña
con el fin de esclarecer los hechos recogidos en la denuncia
que presentó en su día el sindicato CSIF sobre el funcionamiento de dicha
entidad. En estas diligencias, la UMA aportó varias documentación, como un informe
defendiendo la naturaleza privada de su fundación.
En Málaga se realizaron varias actuaciones y,
posteriormente, las diligencias se remitieron a la Fiscalía Superior al
considerar que era la competente en este caso.
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