La instrucción. La juez admite
que el auto por el que quitó los ERE a Alaya era defectuoso
- Núñez Bolaños modifica la resolución de julio por la que mandó dividir la causa
- La magistrada crea seis piezas, dos de ellas distintas a las que ya mandó abrir, y frena la instrucción hasta que no se dicten esas sentencias
Blanco y en Botella.
La juez admite que el auto por el que quitó los ERE a Alaya era defectuoso
- Núñez Bolaños modifica la resolución de julio por la que mandó dividir la causa
- La magistrada crea seis piezas, dos de ellas distintas a las que ya mandó abrir, y frena la instrucción hasta que no se dicten esas sentencias
La titular del Juzgado de Instrucción 6 de Sevilla, María Núñez Bolaños, ha
admitido que el auto por el que el 30 de julio de 2015 dividió el caso ERE en
piezas separadas y que le permitió apartar de la instrucción a la juez Mercedes
Alaya era defectuoso.
La magistrada dictó el lunes un auto de «aclaración-complemento» que arroja
algunas dudas sobre la motivación real por la que, apresuradamente, decidió
dividir la causa en julio, después de que el Tribunal Superior de Justicia de
Andalucía (TSJA) adjudicara la instrucción de los ERE a Alaya mientras el caso
se mantuviera unido. En aquellos momentos, la Audiencia de Sevilla, que
anteriormente ya había dejado clara su postura de que el caso era inescindible,
estaba a punto de pronunciarse de nuevo sobre un recurso de la Fiscalía
pidiendo que se troceara el sumario.
Ahora, a la vista de las advertencias que le han hecho llegar distintas
partes, entre ellas la Fiscalía Anticorrupción, sobre el modo erróneo en el que
estaba instruyendo el caso, la juez ha reconocido su error y tratado de
enmendarlo. Pero el remedio puede ser peor que la enfermedad.
Distintas fuentes consultadas ayer por EL MUNDO, de la defensa y de la
acusación en el caso ERE, calificaron de «barbaridad jurídica» lo acordado por
la juez Núñez Bolaños. Ella misma reconoce en el auto que los tribunales no
pueden variar sus resoluciones una vez firmadas, salvo para completar alguna
omisión y siempre que lo solicite alguna de las partes.
Agarrándose a ello, la titular del Juzgado de Instrucción 6 de Sevilla
dictó el lunes un auto en el que no sólo aclaraba o complementaba el auto de 30
de julio sino que lo modificaba. Si inicialmente la juez acordó decretar
dividir el caso en una pieza principal sobre el fondo de reptiles, otra sobre
las comisiones ilegales y tantas piezas como ayudas a empresas se hubieran
concedido con cargo al programa presupuestario 31.L, ahora acuerda crear seis
piezas: la principal, la de las comisiones y la de las ayudas a las empresas
Surcolor, Acyco, Cenforpre y al tándem José María Sayago-José Enrique Rosendo,
ex concejales del PSOE de El Pedroso que recibieron 34 millones del fondo de
reptiles mediante un conglomerado empresarial.
Resulta sorprendente, pues el 30 de septiembre la misma juez instructora
había decretado el inicio de las piezas separadas de la rama principal, las
comisiones ilegales, Surcolor, Acyco, Río Grande y Calderinox. Ahora, en
cambio, no ve oportuno abrir las piezas de Río Grande y Calderinox y sí las del
tándem empresarial Rosendo-Sayago y Cenforpre, sin aclarar el porqué de lo uno
ni de lo otro.
Esa providencia no tiene efectos, ya que, según Núñez Bolaños, a raíz del
auto aclaratorio carece ya «de objeto alguno». De ese modo, la juez inadmite
los recursos presentados contra ella, entre ellos el de la Fiscalía dudando del
modo en que estaba instruyendo el caso.
La situación es rocambolesca porque sí que existe un auto dictado el 30 de
septiembre ordenando abrir la pieza separada de Surcolor, que no está anulado
ni sin efecto, pero que se basa en la providencia que carece «de objeto
alguno».
Todo esto deja al descubierto las carencias de una instrucción por una juez
que no tenía en sus manos una instrucción penal desde el año 2001 y que ahora
se ha hecho cargo de tres de las grandes causas que están investigando presunta
corrupción en la Junta.
Por ello, el auto arroja dudas sobre la motivación real por la que la juez
Núñez Bolaños dividió el caso pero por una razón más: no sólo no agilizará la
instrucción sino que la ralentizará. La magistrada, sorprendentemente, ha
decidido no abrir más piezas separadas hasta que estas seis primeras no hayan
sido enjuiciadas por la Audiencia de Sevilla y haya dictado sentencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Identifícate para poner comentarios.
Los comentarios solo se podrán poner durante unos días...