- Ha cerrado el ejercicio con una deuda de 3.308 millones con proveedores, entidades y beneficiarios de subvenciones
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/ BALANCE ECONÓMICO
La Junta sólo ha pagado en plazo los sueldos durante 2014
Ha cerrado el ejercicio con una deuda de 3.308 millones con proveedores, entidades y beneficiarios de subvenciones
En plena tormenta política por la presentación de los Presupuestos Generales del Estado se ha conocido el dato de la ejecución presupuestaria de la Junta de Andalucía durante el año 2014 que desvela una importante deuda de 3.308 millones de euros de la administración andaluza con sus proveedores, entidades y beneficiarios de subvenciones. De esta cuantía, 2.074 millones de euros corresponden a obligaciones ejecutadas pero no pagadas en este último ejercicio, y otros 1.234 millones de euros son deudas que se arrastran de años anteriores y que tampoco se han satisfecho.
Según los datos oficiales de la Junta de Andalucía, de la Cuenta General que elabora la Oficina de Control Presupuestario, los gastos corrientes son la principal partida que se ejecuta. Así, la administración andaluza sólo está al día en el pago de las nóminas de su personal y el resto de gastos de funcionamiento de la administración así como de los servicios básicos, que han ascendido a 24.742 millones de euros durante todo el año 2014.
Uno de los principales servicios con deudas es el SAS que tiene obligaciones de pago pendientes por valor de 388 millones de euros, principalmente con proveedores y prestatarios de servicios del sistema sanitario público andaluz. El Servicio Andaluz de Empleo es, a pesar de la situación precaria que está viviendo Andalucía en este sentido con una tasa de paro por encima de la media española, uno de los que más dinero adeuda. Según recoge la Cuenta General, el SAE acumula obligaciones pendientes de pago por valor de 77 millones de euros y lo más llamativo es precisamente las partidas que se adeudan: las destinadas a las ayudas y subvenciones en políticas activas de empleo, que sí están reconocidas en las cuentas de la administración andaluza pero no están abonadas.
La mayor parte de estas políticas activas de Empleo son programas que diseña la Junta pero que ejecutan los ayuntamientos, administraciones que llevan varios meses denunciando precisamente los problemas económicos que esto ocasiona, sobre todo a los municipios más pequeños que tienen que adelantar el dinero de estos programas para pagar las nóminas de los trabajadores que participan en los mismos.
Los incentivos que se convocan para la innovación empresarial también arrastran deudas desde el año 2009. Desde esa fecha, las empresas que han concurrido a estas ayudas están a la espera de la transferencia de 229 millones de euros. Hasta el Plan de Construcción Sostenible, una iniciativa cuya paternidad corresponde a IU en el anterior Gobierno pero que los socialistas han hecho suya, tiene deudas. En concreto, 70 millones de euros de la Agencia Andaluza de la Energía destinado a estas actuaciones.
Las universidades
Una de las principales deudas que tiene el Ejecutivo andaluz es con las universidades públicas. La Oficina de Control Presupuestario de la Consejería de Hacienda reconoce un débito de 605 millones de euros (al cierre oficial de 2014). Es cierto que una parte de esta deuda se ha solventado; exactamente cien millones de euros se han transferido a las universidades, según ha explicado el consejero de Economía y Conocimiento y exrector de la Universidad de Sevilla,Alfonso Ramírez de Arellano, buen conocedor de esta realidad. Pero hasta el propio consejero reconoce el dinero pendiente y está dispuesto a negociar una fórmula para hacer frente a estos pagos en unos plazos que la Junta pueda asumir
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