lunes, 23 de febrero de 2015

Ayudas para 'enseñar a pescar' acabaron en bares y peluquerías = todo depende ¿de que depende????

  • El uso que se hizo de cuantiosas subvenciones acredita la polémica metáfora del líder de Ciudadanos
Aspecto del monumento al atún rojo erigido en la localidad de...

Aspecto del monumento al atún rojo erigido en la localidad de Barbate. EL MUNDO

http://www.elmundo.es/andalucia/2015/02/23/54ead9c7268e3e32488b456d.html

Ayudas para 'enseñar a pescar' acabaron en bares y peluquerías

El uso que se hizo de cuantiosas subvenciones acredita la polémica metáfora del líder de Ciudadanos

Aspecto del monumento al atún rojo erigido en la localidad de...


Albert Rivera, el líder de Ciudadanos, echó mano de un proverbio chino cuando se habla de zonas poco prósperas: «Dale un pescado a un hombre y comerá a un día, enséñale a pescar y comerá siempre». Se refería, claro, al mal uso de las subvenciones y fondos en Andalucía, caso de los ERE y de la formación. Y se armó la gorda en las redes sociales. Finalmente, el joven líder catalán se vio obligado a pedir disculpas si alguien se había sentido ofendido. Sin embargo, un vistazo a la lista de los proyectos subvencionados a los grupos de desarrollo pesquero nos vuelve a llevar al proverbio chino y a la utilidad de ciertos fondos gastados en la costa andaluza.

En Andalucía hay siete grupos de desarrollo pesquero, de Huelva a Almería. En Isla Cristina, si miramos los proyectos financiados, nos encontramos con una subvención de dos mil euros para la ampliación de una peluquería. La línea de intervención es: «Ayudar a pequeñas infraestructuras y servicios para conseguir una cohesión de la zona de pesca compatible con las necesidades del sector y un modelo de desarrollo sostenible». En la descripción del objetivo del negocio pone: «Ofrecer un servicio de calidad con unos precios muy competitivos en el mercado, con una nueva imagen de la peluquería».

Claro que hay subvenciones que tienen sentido, como los 20.000 euros destinados a la instalación de un túnel para la congelación de pulpo, lo que supone un 45% del gasto del proyecto. También otro de fabricación de pienso húmedo para la acuicultura, subvencionado con 14.000 euros. Mucho menos encaje aparente tiene una de 200.000 euros, concedida el 31 de diciembre de 2014, a un taller de chapa y pintura, reparación de llantas, pulido y tapicería a una mujer, porque la línea es «potenciar proyectos, iniciativas o actividades desarrolladas por mujeres o jóvenes de la zona de pesca». De coches, no de embarcaciones.

En la zona del Estrecho, se subvencionó al 100%, 261.000 euros, un monumento al atún para colocar en Tarifa, Barbate, Conil , Chiclana, Cádiz y La Línea. El objetivo de estas esculturas veleta de Pedro Barberá es el «apoyo a las actuaciones de carácter cultural y medio ambiental que enriquezcan el patrimonio existente en la zona de pesca, potenciándolo como oferta turística».

Según las declaraciones realizadas en la inauguración de la veleta colocada en el barrio de La Línea de La Atunara, el monumento era algo muy empresarial, ya que se trata de animar a los negocios de la zona a participar en La Ruta del Atún. Sí es verdad que, bajo ese nombre, se han organizado distintas rutas por los pueblos donde la almadraba es una tradición, lo que no es tan evidente es el papel del monumento del atún.

En Chipiona, el grupo pesquero de Cádiz Noroeste, le otorga 70.000 euros de subvención a una joven que va a instalar un chiringuito en la playa, de Semana Santa hasta el doce de octubre, donde se especifica que se servirá pescado de la zona. 109.000 euros se le otorga a la instalación de una marisquería también en Chipiona.

En Roquetas, en una churrería, se especifica que habrá «ambiente marinero» y el proyecto, en el puerto, recibe una subvención de 11.000 euros. Mil euros, del mismo grupo pesquero, van a ayudar a la puesta en marcha de una sala para actividades culturales en una tetería. En Adra, el mismo grupo destina 25.000 euros a la elaboración de un recetario con productos del mar y 95.000 euros de ayuda a la «creación de un restaurante chiringuito». 21.000 euros van a un proyecto para «dignificar la figura del pescador» en Adra y también en Roquetas del Mar.

En Motril, innovan más y un chiringuito a subvencionar especifica que tiene zona chill out. Así, la empresa Marisquería Chill Out Swing S.L. se ve beneficiada con 295.000 euros para la «instalación y equipamiento de un restaurante-marisquería en Playa Granada en Motril». En Vélez Málaga se han dado 10.000 euros, el 47% del proyecto, en ayudas al Chinchins Bar. El objetivo concreto: «Equipación completa del local para desarrollo de la actividad de bar». Liderado por una mujer, condición para poder acogerse a la línea de financiación.

En las playas de Algarrobo Costa, también se financia otro chiringuito que, eso sí, servirá pescado de la zona, según se especifica, preferiblemente de la lonja de la Caleta de Vélez. El chiringuito se llamará el Paradise y recibió, según lo publicitado por la Junta, 35.000 euros de ayudas. Una cantidad similar se otorgó al chiringuito Rompeolas, de estética parecida, según se aprecia en las fotos en internet. En esa misma zona hay inversiones que, en apariencia, tienen mucho más sentido, como un proyecto empresarial de compra de seis embarcaciones para limpiar al agua de la zona costera, donde casi todos los veranos suele haber problemas de aparición de «natas».

En Huelva, un proyecto de hotel de cuatro estrellas recibió 300.000 euros de ayuda, en la zona de Punta del Caimán, en Isla Cristina. Se trataba, según la línea de actuación, de «ayudar a pequeñas infraestructuras y servicios para conseguir una cohesión de la zona de pesca compatible con las necesidades del sector y un modelo de desarrollo sostenible».


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