Maestros en las mentiras y en los engaños masivos a los andaluces, estos dos tipos pegan otro golpe de tuerca a los bolsillos de todos los andaluces vía BOJA. El pasado día 1 de octubre se publicó la Ley 3/2012 de 21 de septiembre, de Medidas Fiscales, Administrativas, Laborales y en materia de Hacienda Pública para el reequilibrio económico-financiero de la Junta de Andalucía, que ha pasado desapercibida para los sindicatos del régimen más interesados en hacer hervir la calle contra el gobierno central y dejarse acariciar o besar por el nuevo régimen, mientras estuvieron escondidos cómplices de las maldades y los destrozos de Zapatero, de Chaves y de Griñán......

Mientras se desangra Andalucía estos dos tipos cabalgan sobre las tijeras y los sindicatos hermanos callan, castigan a todos los empleados públicos en materia retributiva, atacando las pagas extras de junio y diciembre, y modificando las prestaciones por IT. Además de arrasar con la acción social de todos ellos sine die. Y los sindicatos hermanos miran a Madrid y no a Sevilla.......

http://www.porandalucialibre.es/informativa/opinion/propia/item/543-gri%C3%B1%C3%A1n-y-valderas-gobiernan-a-golpe-de-tijeras

Griñán y Valderas gobiernan a golpe de tijeras.

• Miércoles, 17 de Octubre de 2012 20:30

Maestros en las mentiras y en los engaños masivos a los andaluces, estos dos tipos pegan otro golpe de tuerca a los bolsillos de todos los andaluces vía BOJA. El pasado día 1 de octubre se publicó la Ley 3/2012 de 21 de septiembre, de Medidas Fiscales, Administrativas, Laborales y en materia de Hacienda Pública para el reequilibrio económico-financiero de la Junta de Andalucía, que ha pasado desapercibida para los sindicatos del régimen más interesados en hacer hervir la calle contra el gobierno central y dejarse acariciar o besar por el nuevo régimen, mientras estuvieron escondidos cómplices de las maldades y los destrozos de Zapatero, de Chaves y de Griñán.

Mientras se desangra Andalucía estos dos tipos cabalgan sobre las tijeras y los sindicatos hermanos callan, castigan a todos los empleados públicos en materia retributiva, atacando las pagas extras de junio y diciembre, y modificando las prestaciones por IT. Además de arrasar con la acción social de todos ellos sine die. Y los sindicatos hermanos miran a Madrid y no a Sevilla. Además se modifican los tramos de IRPF Autonómico. Se olvidan, convenientemente, de esa administración paralela creada ex profeso por el régimen para servir al régimen, se olvidan de esa RTVA engullendo millones de los bolsillos de los andaluces, se olvidan de la traición de la deuda histórica, se olvidan que ellos son, en exclusiva, los que recorten en sanidad y en educación, son los responsables directos del los resultados del informe PISA, de los informes sobre la pobreza de Caritas, de la exclusión social que empieza a producirse entre los andaluces, de las bolsas de marginación de todos y cada uno de los barrios y ciudades andaluzas, del hambre que empiezan a tener los niños andaluces. Agamenón y su porquero han emigrado de Andalucía.

Nadie se atreve a levantar hoy una pancarta contra el gobierno de la Junta de Andalucía bajo la amenaza de acabar lesionados a petardazos o simplemente agredidos, como les ocurrió a la CSIF cuando desplegó una pancarta contra Griñán y Valderas hace unos domingos en Sevilla. De libertad de expresión parece que hay quien todavía no la entiende ni la permite, y su verdad impera por las calles y las avenidas. No tocaba ese día ir contra Griñán, a este hay que hacerle el favor en la calle porque la chequera de la Junta está agotada y puede caer algún calienta escaño en las filas sindicales. Pues haciendo memoria las últimas movilizaciones contra la Junta de los sindicatos hermanos están en las hemerotecas y en los libros de historia.

Hoy, por primera vez en Andalucía desde hace 30 años, hay trabajadores y trabajadoras que tienen miedo a expresar en libertad lo que opinan o lo que piensan de las medidas de Valderas y Griñán. Y tienen miedo porque la calle sindical parece querer expulsar de ella a todo lo que no huela a ir contra el gobierno central. Esa corriente parece imponerse sobre la libertad de expresión, uno de los más sagrados derechos de los hombres y las mujeres. La herida de la palabra empieza a estar vigente en Andalucía como una de tantas lacras en las que nos etiquetan. Ahora las palabras contra Griñán o Valderas se pronuncian en privado, en el calor de la barra de un bar – siempre pendiente de mirar hacia todos lados – y en la hoguera del hogar, pero siempre detrás de las puertas de la sociedad, detrás de los muros de las calles porque hoy solo un grupo puede gritar sus consignas en libertad.